Cazar en los lugares más lejanos y exóticos del mundo

El archipiélago de las Åland —situado entre Finlandia y Suecia— está cerca de la mayoría de los europeos, sin embargo, no son muchos los que cazan aquí. ¡Y creemos que se pierden algo increíble! Hay casi 7000 islas en total y son conocidas por su impresionante población de corzos. La temporada de caza comienza el 15 de agosto y dura un mes. Y si quiere visitar las islas en otra época del año, prepárese para una cacería de perros mapaches: son una especie invasora aquí y por eso su temporada de caza dura todo el año.

Si busca otro lugar para cazar en Noruega, nuestra embajadora de la marca, Andrea, puede darle un consejo: «Sigo pensando que el lugar más exótico en el que he cazado debe ser el terreno que rodea mi casa: el océano que rodea las islas Lofoten. Aquí cazo sobre todo focas y es mi tipo de caza favorito. Es algo muy especial: las vistas, los sonidos del océano y la emoción y la adrenalina que te invade».

Cuando pensamos en Islandia, pocos pensamos en la caza; sin duda es un lugar precioso para visitar y quizá para pescar, pero no parece que lo sea para cazar. Pues bien, nuestro embajador de la marca, Jón Rúnar, está aquí para demostrar que esa idea es errónea. Nacido y criado en Islandia, allí fue donde aprendió el arte y el oficio de la caza. 

Cazar aquí es sin duda una experiencia única. Los paisajes ásperos y majestuosos fascinan por su belleza, mientras que un terreno bastante difícil, hace que el viaje hasta el lugar de caza sea toda una experiencia. En cuanto a los animales, no espere una gran variedad: las especies autóctonas están protegidas, por lo que solo podrá cazar especies invasoras. Entre ellas están los gansos, las perdices, los cormoranes, los araos y algunas otras aves marinas. Si le gustan más los mamíferos, le gustará saber que los renos no son autóctonos y, por tanto, se pueden cazar. Sin embargo, solo se conceden unos 1200 permisos para cazar renos al año, lo que significa que no solo hay que participar en la lotería, sino también tener suerte. 

Y si hay un mamífero que los nativos pueden cazar de verdad siempre que quieran, es el visón. Curiosamente, aquí se considera una plaga, ya que daña la flora y la fauna autóctonas (además de matar ovejas), por lo que los islandeses ni siquiera necesitan un permiso para cazarlos. Sin embargo, los visitantes no tienen permiso para cazarlos.

Si está dispuesto a viajar al otro lado del charco, la Patagonia puede ser el lugar idóneo. Solo se aconseja que vayan allí cazadores experimentados, ya que la caza puede suponer todo un reto: el terreno es bastante accidentado y las caminatas pueden ser largas. En cuanto a la caza, la Patagonia alberga muchas de nuestras especies favoritas, como el ciervo y el gamo y el jabalí, así como tipos más exóticos de carneros, cabras, íbices e incluso pumas.

Nueva Zelanda es un lugar exótico en sí mismo y atrae a muchos viajeros. Si piensa visitarla, le sugerimos que también deje en la maleta su licencia de caza: el país es ideal para cazar animales de montaña. Hay muchas especies de ciervos, como el rojo, el gamo, el sika y el sambar, así como tahúres, rebecos, carneros y cabras del Pacífico. Aunque hay que tener en cuenta que es posible que deba volar en helicóptero para llegar al lugar deseado, ¡hablando de destinos remotos!

Japón no suele ser el lugar que nos viene a la memoria como destino de caza de primer orden, pero sin duda es un sueño que no sabíamos que existía. Aunque conseguir una licencia allí es un proceso largo y exigente tanto para los locales como para los extranjeros, la caza es muy bienvenida actualmente. Con las poblaciones de jabalíes y ciervos sika fuera de control y sin depredadores naturales, los funcionarios del gobierno están introduciendo varios incentivos para los cazadores que podrían ayudar a controlar las poblaciones y, de ese modo, minimizar las pérdidas que sufren los agricultores.